Descubriendo el D.F (3er día)

Mi último día en el DF, comenzó con las respectivas quesadillas de maíz azul en un puestito cerca de la casa de Ricardito y Santiago. Estas quesadillas tienen a mi gusto un sabor un poco amargo, podría compararse a las arepas peladas. Como bebida para acompañar, venden jugos de diferentes sabores, pero extremadamente grandes, casi te sirven un litro de jugo en el vaso.Luego de este rico y nutritivo desayuno, nos fuimos para el Museo Nacional de Antropología, que se encuentra ubicado en el bosque de Chapultepec. 

Antes de entrar a este inmenso museo nos paramos a ver la presentación de una “Danza de los voladores”; esta es una de las danzas indígenas más antiguas, que representa la fertilidad.

Danza de los voladores

Normalmente se utiliza un tronco (en donde nosotros lo vimos, utilizaban un palo de metal), arriba hay una base de madera, que gira gracias a un pivote y donde se amarran en cada extremo los cuatro danzantes voladores (simbolizan los puntos cardinales) y también hay una persona que toca el tambor y una flauta a lo alto. Los danzantes voladores se lanzan al vacío, boca abajo (están amarrados en la cintura)  y giran 13 veces cada uno de ellos, que multiplicado por los cuatro voladores da el resultado de 52, ya que este número es el símbolo del ciclo de 52 años del calendario indígena.

Ver esta danza, da un poco de vértigo, ya que asusta ver a los danzantes colgados en el aire.

Museo Nacional de Antropología

Al terminar, entramos al Museo, para comenzar la visita arqueológica. Este museo no tiene nada que envidiarle a un museo en Europa,  tiene varias salas, pero dado el poco tiempo que teníamos, aunado a que llevábamos dos días sin dormir, decidimos solo visitar algunas salas: la de Teotihuacan y la de los Maya, en donde se puede apreciar la “Piedra del Sol”. Este museo, forma parte de las paradas obligadas en el D.F, por mi parte regresare con un poco mas de energía, para poder disfrutar del legado arqueológico de los pueblos de Mesoamérica.   

Museo Nacional de Antropología 

Luego de darnos una vuelta por este bello museo (recuerden que los domingos los museos son gratis), teníamos un poco de hambre así que nos fuimos a comer a la Casa de los Azulejos, pero antes de llegar nos paramos a ver un hermoso mural de Rivera. Este mural tiene como nombre "Sueño de un domingo por la tarde en la Alameda" (Diego Rivera – 1946) y se puede apreciar en el Museo Mural de Diego Rivera. Originalmente se encontraba en el hotel del Prado, pero luego del terremoto se trasladó al museo. Es un mural hermoso, que relata un sueño en donde el pintor nos pasea por la Alameda, nos hace espectadores de sus recuerdos de niñez y juventud, acompañado de personajes que conoció, y también nos muestra la historia de Mexico, representada por alguno de sus protagonistas, como el dictador Porfirio Diaz. Vale la pena entrar unos segundos para apreciar esta hermosa obra.

Ya con bastante hambre, nos fuimos corriendo para la Casa de los Azulejos que está ubicada en el centro histórico de México. Es una casa que está recubierta de azulejos y que desde 1917 albergaba una fuente de soda llamada “Sanborns Bros. S.A”, luego esta fue comprada por Carlos Slim, y ahora se encuentra una de las sede de la franquicia Sanborns. Comimos unas ricas enchiladas suizas en este restaurante mexicano.

A pesar de estar super cansados, el día aun no terminaba, teníamos aun otro compromiso: La lucha libre en la Arena Coliseo. Si, es una tradición mexicana que por sus particularidades le da un toque propio del país, que la caracterizan de otras luchas. A mí, desde pequeña me encanta la lucha libre, así que disfruté un montón de este “espectáculo”. Es algo que hay que ir a ver si están en México. Además de ver a los luchadores que se “pelean” de forma bastante cómica, es interesante ver al público, que va desde jóvenes, personas mayores, familias, todos juntos gritando con furia en apoyo a sus luchadores favoritos. (Hay una parte del coliseo que esta destinada a los seguidores de los “malos”, mientras los demás estamos apoyando a los luchadores “buenos”. Aquí les dejo los nombres de las estrellas de la noche: “La Sombra”, “Super porky”, este fue el personaje estrella de la noche, (a pesar de que no hacia nada) un señor ya maduro, pequeño, con una inmensa barriga, y vestido con unos calzones brillantes y el “Valiente”.

Lucha libre en Arena Coliseo

      Me encantó el D.F, y ya espero con ansias mi próxima visita